viernes, 14 de mayo de 2010

Este dolorcito.

Este dolorcito no mata pero no me deja vivir, ni un día, ni dos, ni tres días.

Este dolorcito me tiene ocupado, no sé si tanto como para no pensar en ti.

Este dolorcito  de cabeza, de oido, de ojo, de tripas, de manos, de piernas duras a las 6 de la mañana, de riñón sin conservarse en alcohol, del lado ziquierdo, de arriba a abajo, de colchón de lujo, de té de limón,  de corazón que se muere por latir.

Este dolorcito se me acaba hoy, no más, no menos, no triste ni felíz.

No hay comentarios: