Sucede que hoy la culpa la tiene Mariel, su insomnio arremetió contra mi y mi pobre corazón, empezamos escuchando canciones para la ocasión, el encuentro se torno más agudo hasta que sonaron las canciones que no tenían que sonar. Declaro el juego a tu favor, me declaro perdedor.
Hoy me dieron ganas de estar con los viejos amigos