Te fuiste justo a tiempo
Siempre me decías "si va a doler que duela de una vez Alex"
Esta vez dolió más que nunca, como hace mucho tiempo no dolía el lado izquierdo, tan adentro.
Te fuiste justo a tiempo ahora que a las tardes les da por llorar y la ventana queda limpia.
Ahora que la cama se ve tan grande, se ve tan ancha, se ve sin ti.
Te fuiste justo a tiempo aquí ya no había más que hacer.
Yo sé que a nadie le interesa llegar y que te esperen con la mesa puesta, eso es tan 1901 tan a la vieja escuela, es tiempo de ir para delante, seguro buscabas un alguién más sofisticado.
Yo sé que a nadie le interesa llegar y que te esperen con la mesa puesta, eso es tan 1901 tan a la vieja escuela, es tiempo de ir para delante, seguro buscabas un alguién más sofisticado.
Te fuiste justo a tiempo ahora que me da por cocinar e insisto
a nadie le interesa probar la sopa que se cocina a fuego lento por 15 minutos,
a nadie a absolutamente a nadie le interesa el olor de la comida que se resiste a cocinarse a manos de los inexpertos.
Si te sirve de consuelo soy un experto en la sincronizadas y el juego de naranja y mis sandwiches son los mejores, te podría apostar que son los mejores.
Te juro que nunca hubiera cocinado algo con piña y mucho menos te hubiera dado un té de canela y por supuesto a la hora de comer nunca hubiera sonado un organillero. De darte de comer en la boca ni siquiera pensarlo.
Te fuiste a justo tiempo seguramente hubieras perdido la apuesta, si era por lo que tenías que pagar
no te lo hubieras tomado tan en serio, ni te hubiera cobrado, siempre tuviste saldo a favor.
Te fuiste a justo tiempo seguramente hubieras perdido la apuesta, si era por lo que tenías que pagar
no te lo hubieras tomado tan en serio, ni te hubiera cobrado, siempre tuviste saldo a favor.
Te fuiste justo a tiempo ahora que le puse cuerdas a la guitarra, ahora que el pasillo es tan aburrido que no nos guarda los besos, ni las caricias, ni mucho menos tu espalda recargada en la pared, mientras mis labios exploran poco a poco ese pequeño paraiso que vive en ti justo entre tu boca y tu oreja.
Tu cuello siempre fue mi perdición.
Te fuiste justo a tiempo ahora que el doctor me resetó guardarme de casi todos los pecados.
Te fuiste.
2 comentarios:
Hay textos flacos. Hay textos que son banquetes. Hay textos carnosos que se roen hasta llegar al hueso. Hay otros que ya estan carcomidos cuando uno llega a leerlos, y así sucesivamente.
El esqueleto de este lo encontré temblando y como la lluvia se calló tantito un rato me dejó escuchar cómo titiritaba.
Tiene codos y rodillas, arrugas para mi conocidas, los párpados tristes y la piel adusta.
Este texto es un brindis.
La etiqueta, una falacia.
Un abrazo con bufanda para su autor.
"Te fuiste justo tiempo ahora que a las tardes les da por llorar y la ventana queda limpia."
Me ha gustado mucho.
es hermoso encontrarte en este lugar..
siempre me haces sentir que en esto del amor a nadie le va bien!
gracias por no hacerme sentir tan única...
viva la gente que trata de cocinar...
unos sandwich... y otras pastas!
tkm
Publicar un comentario